Bitácora #8
La bitácora pasada me fui un poco espiritual y reflexivo con
usted señor lector. ¿Lo hice reflexionar o le toqué las fibras más inmersas en
su alma y corazón? Seguramente no. Seguramente usted es de las millonésimas
personas que deja su trabajo, publicado al foro y apaga y vámonos. De lo
contrario si a usted le gusta explorar y dentro de los múltiples lugares en el
web vino a dar con mi prosa, se lo agradezco. Y acá es el punto por el cual
quiero empezar mi relatoría hoy: si usted se queda esperando a que le lleguen
las cosas, a que le escriba x o y, a ganarse un 5, y usted solamente está
viendo el cielo, déjeme decirle que está en otro cuento.
Hace 8 días le hice en mil palabras un breve recuento del
budismo como visualizador de nuestra alma, y como estar en armonía con nosotros
mismos. Pues bueno hoy vamos a engancharlo por ahí: según el islam, hay dos
tipos de belleza: la externa que satisface nuestras emociones, instintos y e
placer empírico. Y en contraposición se encuentra la belleza que fluye a través
del tiempo y espacio. Sí tiene toda la razón, es la belleza espiritual o interna.
Le sonará otra vez a carreta de libro de autoayuda estoy
seguro. Pero quiero irme por el lado del arte en la cultura árabe. ¿Sabe usted
qué es el artista en medio oriente? Es el que puede moldear el alma. Suena muy
lindo y todo, pero ¿qué significa? Implica a partir de la belleza de la
perfección en la creación, armar representaciones con las cuales nuestra alma
se conecta y logra alcanzar un plano diferente. Vea se la voy a poner más
simple con un caso concreto: la danza árabe.
También conocida como la danza del vientre, en occidente lo
vemos como un baile de seducción y de pareja que tiene como objetivo establecer
un vínculo sexual. No es del todo cierto. En los países árabes este baile tiene
como centro el flujo energético del movimiento con los chakras del cuerpo. Es
una forma de estimular el paso energético dentro de nosotros para lograr una
mayor armonía con los elementos a nuestro alrededor y el tiempo. Con esto vengo
a explicarle que las cosas solo las vemos desde nuestra perspectiva cegada de pensamiento
occidental, y la importancia de realizar algo por su cuenta para estar estable
y lograr un objetivo.
Bueno y aquí lo enlazaré con la clase de una manera algo
peculiar. Perdóneme sino lleva el hilo o si cree que hablo mucha carreta
querido lector. La clase del lunes empezó algo reflexiva con el tema del pasado
y el flujo del tiempo. Cobos en pocas palabras sintetizó el pensamiento de vivir
en el pasado como uno de los problemas que comúnmente pasamos en nuestro día a
día. Sí, muchas veces pensamos que no dijimos lo mejor, que no supimos
expresarnos claramente, o que si hubiera hecho tal cosa probablemente mi futuro
sería diferente. Pero el caso es que no se puede hacer nada, y no vamos a
lograr modificaciones en nuestro presente por intentar enmendar errores
previos.
Voy a usar una palabra que en las últimas semanas ha sido mi
léxico diario: “parchese”. Tengo un amigo que siempre me lo dice. Soy un sujeto
con algunos defectos de control y
preocupación. Vea la estructura de esa palabra: “pre-ocupación”. Quiero que la
visualice y aunque le suene obvio ponga mucha atención. Deje de sentir agobio
por algo que no ha pasado o ya pasó. Ocúpese más bien en el presente y los
asuntos que puede solucionar hoy.
Así que puede ocuparse en lo que le piden en la mayoría de
trabajos de la universidad con esas resonantes y que ya nos duele la cabeza de
tanto escuchar: “normas APA”. En eso se fueron casi las 2 horas de clase del miércoles
pasado con la exposición de mis compañeros. No se lo voy a negar; por más
disposición que Alejandro, Micaela y Maria Camila tuvieran, no es un tema que
entre fácil. Se lo digo yo en octavo semestre que más de una vez he estado en
presentaciones de normas bibliográficas formales y por más didáctico que se
intente explicar, es un tema bastante cuadriculado.
La exposición fue clara y concreta: y aún así se fueron las
2 horas de clase. La manera de abordar las normas fue desde la forma y formato
que piden las normas, así como el contenido que se usa. Dentro de las temáticas
presentadas estuvieron las citas, las referencias, las formas adecuadas de
parafrasear y las políticas de propiedad que se usan para proteger los trabajos
principalmente académicos.
Del mismo modo se profundizaron en las normas ICONTEC. ¿Qué
le dije hace un rato? No nos podemos sesgar por un punto de vista, en este caso
con las APA. Por más que sea el sistema universalmente aceptado es bueno ver la
otra cara de la moneda. Es importante que investiguemos los diferentes manuales
que se exponen para poder discernir con cual nos quedamos y poder juzgar, más
no solo aceptar.
Una de las clases interesantes que se ven en esta clase de
Información y Documentación es entrar en la exploración de las normas, más no
solo aplicarlas. Es pertinente al realizar una intertextualidad entre lo que
nos dice el manual, y la forma de enganche con la materia. Espero que las demás
exposiciones en cuanto a contenido sean igual de buenas como esta primera.
Voy a dedicar las últimas palabras de hoy a retomar el punto
del cual arrancamos. Si decidimos usar APA o ICONTEC, o si bien definimos si
parafrasear, o citar dentro del texto o no, depende netamente de usted. Hace
poco hubo un texto que me interesó sobre el amor. Bueno ya, no un texto. Una conversación.
Resumiendo, llegamos a que hay diferentes formas de amor; no hay perspectiva más
acertada. Lo cierto es que lo más importante es ponernos antes que las
externalidades y confiar en nuestras capacidades para hacer x o y cosa. Eso es
amor propio.
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